Si mis palabras pudieran tocarte llenaría de mariposas tus labios y recorrería tu piel con la magia de esta distancia.

Se reciben sugerencias...

El grupo de Calipso, Marito Mortadela, el pintor, los guitarristas que se ubican a la sombra del árbol frente a la gran vía, el señor no vidente (también guitarrista) siempre acompañado de su madre, los vendedores ambulantes, los fotógrafos y vendedores de maíz para alimentar a las palomas, y muchos personajes más forman parte del día a día de la plaza de la cultura y sus alrededores.

Con el paso del tiempo las caras se van haciendo conocidas, y uno va formando cada vez más parte de esta rutina, al punto de que alguno de los vendedores ya hasta saluda con el tradicional "¿cómo amaneció machita?".

Dentro de este reducido espacio encontramos todos los días actores diferentes, sin embargo las escenas suelen ser las mismas, los turistas fotografiándose en la entrada del teatro nacional, los niños "correteando" a las palomas, uno que otro periodista por ahí entrevistando a los transeúntes, presentaciones de grupos de teatro o música.

Pero este miércoles, la escena cambio, de pronto apareció en el medio de la plaza una estructura muy particular, construida con camisas de colores, la cual resultaba imposible no acercarse a observar.

En el medio de la misma había un joven sentado en una silla, a sus espaldas se ubicaba en una mesa una computadora personal que proyectaba su imagen sentado en la silla.

Es claro que mi interés aumentó al ver tal escena, y en ese momento concluí que la misma pretendía llamarnos la atención del como a pesar de tener cada vez más medios para comunicarnos nos aislamos, y por su puesto buscando validación a la interpretación, me dirigí a otro joven que estaba fuera de la estructura explicando de que se trataba , quién ante mi mal planteada pregunta de: "¿Qué es esto?" únicamente me respondió: "Esto es una muestra de arte".

A preguntas tontas respuestas tontas, no pude más que seguir mi camino y seguir pensando en como debía de interpretar la "muestra de arte" , así que sobre la misma se reciben sugerencias...

El Invisible

Hay días de días, pero hoy es tu día, y pese al paso de los años y a mis intentos infructuosos de olvidarlo siempre ocurre algo que hace que la realidad me explote en la cara.

Es curioso como el universo en ocasiones se confabula y hasta se burla en nuestra propia cara, y hoy me evidenció que efectivamente el invisible sos vos, que a pesar de la ausencia estás presente y que no tiene nada de malo recordarte e incluso extrañarte, sí en definitiva me enseñaste el camino para contemplar por mí misma las estrellas.

Mi conclusión final simplemente es que hay personas que pasan por nuestras vidas y no solo nos marcan, nos cambian, y más allá de entristecer ante la ausencia, se agradece tu paso por mi paso.